Partido importante que define el destino del segundo del grupo luego de la victoria de Argentina sobre Corea del Sur en el grupo B de la competición. Este partido aunque poco atractivo que se disputo entre griegos y nigerianos fue condicionado en sus acciones por una tarjeta roja a causa de una actitud totalmente antideportiva del jugador Sani Keita a los 33 minutos de partido sobre Torosidis, cuando el equipo de Lars Lagerback lideraba las acciones sobre un cuadro griego sin ideas y estaban los africanos superando en el marcador 1 – 0 con gol de Kalu Uche en el minuto 15 a pelota parada superando al guardameta Tzorvas sobre los europeos. La expulsión obligó a Lars Lagerback a replantear su alineación que curiosamente ingreso a un delantero revistiendo la importancia de este partido en vez de un defensor para mantener el marcador e inmediatamente Otto Rehagel aprovecha su superioridad en la cancha y hace ingresar a un jugador con características ofensivas, Samaras; por lo que para el final del primer tiempo Grecia se encimaba al ataque gracias a las desatenciones en la defensa nigeriana exigiendo más que nunca al cancerbero Enyeama.
En una jugada en carrera Katsouranis que amenazaba con quedar adelantado retrocede y asiste a Salpingidis para que con su remate certero al arco anote el primer gol de la selección griega en un mundial en el minuto 43. Para la segunda mitad el equipo nigeriano bajaría los brazos con una escuadra griega que se volcaba cada vez más al ataque adelantando todas sus líneas provocando el gol por intermedio de Torosidis en el minuto 71, enterrando así cualquier esperanza de Nigeria que se vio mermada en todas sus líneas a lo largo de todo el partido desde la tarjeta roja ya que antes de ella era otro partido totalmente diferente que dominaban a placer los nigerianos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario